Hoy ha sido un día especial, triste, pero especial. Porque esta
noche brilla una estrella más en el cielo. Una muy bonita, pequeñita, pero casi
más brillante que una supernova.
Durante tu estancia en
la tierra, estrellita, fuiste amada y feliz. Pero como sucede con las luces
más hermosas, el cielo te ha reclamado demasiado pronto.
Por eso, esta noche, Nala, brillarás en el cielo iluminando
desde allí arriba a los corazones que tanto te quisieron. Para siempre. Y nunca
serás olvidada.
Hasta siempre, estrellita.
No hay comentarios:
Publicar un comentario