martes, 17 de marzo de 2015

Gracias Paula, 
por haber comprendido la esencia de León el britano​.


¿Qué se puede decir de una novela que te atrapa desde la primera escena, una escena tórrida y sin embargo llena de una tristeza tan sentida que no puedes sino sentir compasión por un ser que no tiene elección y que sin embargo se esfuerza y lucha por hacer el menor daño posible en una situación en la que el dolor esta indeleblemente presente.
Puedo decir, y digo, que he disfrutado cada página.
La historia de Eodan nos adentra en la antigua Roma, con su diferencia de clases, con sus luchas políticas de una forma muy bien documentada y ambientada con tal acierto que puedes ir caminando por sus calles adoquinadas o acariciar a "Dwin" mientras contemplas al hermoso gladiador que solo tiene ojos para Claudia.
Un corazón de hielo se derrite ante la máxima expresión de juventud, inocencia y belleza y el lector no puede sino enamorarse de esa historia entre los dos y desear contra toda esperanza que triunfe el amor allá donde la vida arrebata.
He padecido una preocupación terrible, a la primera mentira de León ya sabes que Claudia va a sentirse engañada y vas leyendo y temiendo y te adentras más y más y acabas como León, atrapado en una red tan poderosa que es incapaz de desenredarse y al final... ufff.,.
Hubiera zarandeado a Claudia al final, ainss.... Niña cabezota que se niega a comprender pero es lo que tienen las emociones, que a veces son más espesas que lo que vemos y sentimos y empozoñan hasta el más puro amor verdadero.
Recomiendo esta novela a todos y todas las amantes del amor incondicional.
Una lectura que no se olvidara.
Por cierto, queda pendiente la historia de Aisling y Cayo.
Enhorabuena, Olalla.

http://www.amazon.es/Le%C3%B3n-Britano-HQ%C3%91-Olalla-Pons-ebook/dp/B00MY0SCWW/ref=sr_1_1?ie=UTF8&qid=1426604195&sr=8-1&keywords=leon+el+britano

1 comentario:

  1. Preciosa historia, a mí personalmente me ha marcado y seguiré recordando al Britano "per secula seculorum". Jamás había leído nada ambientado en la antigua Roma. Me alegro que esta primera incursión haya sido de tu mano, porque no podría tener mejor anfitrión.
    Infinities of loves!

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