El sanador de caballos, de Gonzalo Giner

Hacía ya mucho tiempo que no cerraba las páginas de un libro con los ojos inundados en lágrimas. Debo agradecer a Gonzalo Giner el haber escrito “Es sanador de caballos” Un libro no solo entretenido, sino también emotivo y de una sensibilidad poética. Una verdadera maravilla.

Agradezco también haber conocido a Sabba, la magnífica yegua del protagonista Diego, y en mi opinión, el alma de esta increíble gesta. Sabba para mí representa el valor, la belleza y la fidelidad de unos animales maravillosos y mágicos, como son los caballos, capaces de leernos el pensamiento… Los que amamos con locura al caballo, disfrutaremos sobremanera de esta gran novela.

“Cuando Allah quiso crear al caballo dijo al viento del Sur:

- De ti produciré una criatura que será la honra de mis allegados, la humillación de mis enemigos y la defensa de los que me atacan.

Y el viento del Sur respondió:

- Señor, hágase según tu deseo.

Cogió Él entonces un puñado de viento y creó al caballo, diciendo:

- La virtud inundará el pelo de tus crines y tu grupa. Serás mi preferido entre todos los animales porque te he dado amo y amigo. Te he conferido el poder de volar sin alas, ya sea en el ataque o en la retirada. Sentaré a los hombres en tu grupa y rezarán, me honrarán y cantarán aleluyas en tu nombre. Ahora ¡ve!, y vive en el desierto durante cuarenta días y cuarenta noches. ¡Sacrifícate!, y aprende a resistir la tentación del agua, broncea el color de tu cuerpo y aligera tus músculos de grasa, porque del viento vienes y viento debes ser en la carrera”

Fragmento de “El sanador de caballos”